Little Richard: más grande que la vida, la llama viva

Este pasado sábado día 9 de mayo de este año 2020 nos ha dejado para siempre el que para muchos fue el rey de Rock & Roll, Little Richard.

Había nacido hace 87 años, el 5 de diciembre de 1932 en Macon en el estado de Georgia.

Cuando vino al mundo se llamó Richard Wayne Penniman. Su padre un clérigo adventista lo adoctrino en el góspel desde bien pequeño.

Cuando Richard conoció el Rhytm and Blues fue porque conectó con la música que hacían gente como Billy Wright y el pianista Eskew Reeder Jr. (Esquerita) este último fue quien le enseño su técnica al piano.

Hizo varios intentos por grabar un disco presentándose con 16 años a un concurso y lo ganó, el premio grabar un disco, pero….

Como siendo un crio su padre le había echado de casa, tuvo que seguir trabajando en lo que pillaba por ahí.

Con solo 19 años escribió el gran tema “Tutti Fruti”, eso era entonces el año 1955, y no le quedó más remedio que venderlo, ¿a quién?, pues al típico aprovechado del momento, el famoso productor y arreglista Robert Blackwell. No por ello dejó de triunfar como nunca había soñado. Fue un éxito rotundo y el principio de una extraordinaria carrera musical.

Empezó a hacer covers de otros autores, y, canciones como “Long tall Sally”, “Ript it up” o “Keep a knockin” que no siendo suyas le encumbraron aún más.

Si ademas el seguia componiendo y publicando canciones como “Good golly Miss Molly”, “Jenny Jenny”, «Slippin’ and Slidin'»,»Hey-Hey-Hey-Hey!» y “Lucille”; para que quería más.

De improviso y corriendo el año 1958 Little Richard, dejó la música a todos los niveles y se dedicó a estudiar y predicar el evangelio.

Con “La invasión británica” encabezada por The Beatles y demás grupos europeos que interpretaban el rock & roll de Little Richard y de Chuck Berry, se vio “obligado” a volver a los escenarios y los estudios de grabación.

En 1962 Little Richard les devolvió la moneda a los europeos llevando a cabo una gira por la Gran Bretaña.

Consiguiendo éxitos como “Bama lama bama loo”. A partir de ese momento y hasta ahora ya es otra historia.